Yo estudie en El Sistema de Bachillerato del Gobierno de la Ciudad de México, cuando Andrés Manuel López Obrador fue jefe de gobierno
Fue la experiencia educativa más agradable que he tenido, me apoyaron, me ayudaron y me convertí en una persona crítica. Ahí encontré los profesores más preparados que he tenido, encontré libertad y la capacidad de pensar por mí mismo. Sin embargo tanta libertad hace que muchos alumnos fracasen escolarmente.
Desde el inicio del IEMS, se viene observando la deserción y el fracaso escolar. Por experiencia propia, desde que yo era alumno a mediados de la década antepasada, presencié como muchos de mis compañeros no finalizaron o claudicaron en sus estudios.
Durante el recorrido de tres años, me percaté de la gran cantidad de compañeros (amigos), que ya no regresaban a clases. Truncaban sus estudios. De hecho, la gran mayoría de mi generación, se quedaron más de los tres años propuestos, alcanzando un recorrido de hasta ocho años. Muchos de ellos fueron expulsados al reparar las autoridades su retraso. Algún tiempo después, me enteré que la situación era similar que cuando yo estudiaba. La preparatoria, conforme pasaban los semestres, se quedaba sin alumnos.
No se han alcanzado los objetivos deseados de la educación con respecto al egreso. Muchos alumnos no lo hacen en los tres años que tiene programado el sistema escolarizado IEMS.
El abandono y el fracaso escolar, tienen un alto índice que hay que reducir o superar. La mayoría de alumnos no concluyen sus estudios satisfactoriamente, se van de la escuela, y/o no obtienen las notas esperadas para recibirse. Esto es un problema que debemos rebasar.
Al parecer la Institución tiene como bases y fundamentos una educación diferente a otras que hay en la CDMX. Este planteamiento se propuso con la finalidad de acercar la educación a zonas donde se necesita, para estudiantes que no alcanzan lugar en otras instituciones. Advierten con convicción, que existen diversos caminos para el saber, la enseñanza, el aprendizaje y las relaciones entre los actores del fenómeno educativo.
La preparatoria señala lo evidente y frecuentemente ignorado, que la educación está al servicio de la sociedad. La propuesta educativa del IEMS pretende que sus alumnos sean críticos entre otras cosas, analíticos, observadores, conscientes de su propio mundo. La educación del instituto parece no ser una educación tradicional. Como una simple narración de contenidos que por ello mismo tienden a petrificarse o a transformarse en algo que no se puede defender.
La institución cumple con muchos requisitos de una educación liberadora y flexible. Sin embargo a mi parecer, no se cumplen las metas a pesar de cumplir muchas otras. Por eso resulta relevante estudiar, investigar e identificar los significados relativos al fracaso escolar de dicha institución.
