Aunque parezca mentira la cinta se inspira en una historia real ocurrida en República Checa en 2007, se trataba de una mujer llamada Barbora Skarlová.
En “La huérfana” (2009), llegando al clímax del filme, se descubre que Esther no era una menor de edad sino que una mujer de 33 años con trastornos mentales y una enfermedad llamada hipopituitarismo que la hacía lucir como una niña pequeña.
Al igual que Esther, sufría de hipopituitarismo, por lo podía verse como una niña de 13 años. Aprovechó su apariencia, y luego de escapar de un psiquiátrico, se hizo amiga de Klara y Katherina Mauerová, hermanas con trastornos mentales y quienes la vieron con buenos ojos, decidiendo adoptarla. Al pasar del tiempo, Barbora obligaría a las hermanas, mediante su poder de persuasión, a encerrar, mutilar y maltratar a los hijos de Klara. Conoce el caso real en este vídeo.