Una Banda Sonora Rescatable…
“Si la película de tu vida no es lo que esperas… recuerda que siempre tendrás en la banda sonora la opción para mirarla con un tono distinto. O en su defecto y como ocurre a menudo en el cine, para intentar encontrar algo rescatable, incluso, en la peor de las producciones.” -Oliver Pontones Roldán, musicalizador.
Es común encontrar en el mundo del cine producciones que no consiguieron ser aclamadas a pesar de sus intentos por consagrarse… o en otro sentido, que simplemente no alcanzaron el éxito esperado en taquilla. No obstante, muchas de estas mismas películas, irónicamente, alcanzaron otro tipo de reconocimiento, en el terreno de la música, a través de su banda sonora o soundtrack.
A continuación, ponemos en disposición algunos ejemplos, al respecto de este tipo de producciones, cuya banda sonora o soundtrack pueden considerarse bajo el título de rescatable. Cabe señalar qué contaremos, en su gran mayoría, con un caso por publicación, para examinar; a través de esta y las próximas ediciones.
Dumbo, 2019. Banda Sonora por Danny Elfman.
Una clara muestra de los grandes fracasos taquilleros al respecto de producciones de enorme presupuesto en los últimos años, a cargo de Tim Burton y Disney. No obstante y con relación a la banda sonora, compuesta por Danny Elfman, podemos catalogarla como uno más de sus trabajos dignos de escuchar.
Al respecto de esta composición a cargo de Danny Elfman, aunque no llega a ser fascinante como muchas de sus clásicas y grandes obras, por otro lado, podemos decir que resulta interesante, ya que mantiene una tendencia de exploración constante, y como algo habitual a partir de sus trabajos de los 2000´s (Spiderman; Hell Boy; Terminator Salvation; etc.), para romper y alejarse de su sonido característico como compositor (consagrado durante la primera mitad de los años noventa), encontrando nuevas aberturas, así como formas sonoras que se adecuen al concepto visual y tono cinematográfico en cuestión, a través del uso de distintos instrumentos, percusiones, además de texturas, timbres e incluso ruidos.
Con relación a este aspecto, en torno al proceso de creación de los temas para las distintas producciones cinematográficas, el autor ha manifestado… “No hay reglas… Si funciona, es válido”. Es como sumergirse en un pozo, en donde no tienes idea de cuanto hay que descender para encontrar agua (…) en cada nuevo trabajo siempre me pregunto cuánto debo bajar la cuerda para lograr escuchar la sustancia (Elfman, Spider-Man 2 Making The Amazing #11 Sound & Music).
Aún así, es importante distinguir que dicha tendencia de exploración, marcada igualmente en la presente banda sonora- Dumbo, se desenvuelve, en términos analógicos… -como el fantástico mecanismo de reloj en la tierra sombría de las maravillas… cuyo péndulo rotulado con motivos de franjas bicolor marcan los compases-… dentro de una línea de búsqueda, que oscila y siempre regresa en diferentes puntos… hacia el aclamado y original estilo del autor: Ese genial y maravilloso universo sonoro de fantasía, creado en películas como Batman (1989); The Nightmare Before Christmas (1993); Edward Scissorhands (1990); Beetlejuice (1988); etc.
No obstante, en lo personal, persiste cierto vacío, un deseo insatisfecho por encontrar en la banda sonora mayores niveles de identificación musical con el personaje- Dumbo (salvo quizá en Train’s a Comin’, tema adjunto al inicio del apartado). Tal vez, a causa del gran posicionamiento que el personaje en cuestión, tiene dentro del imaginario social, desde hace décadas; en choque, y bajo cierto contraste, con el propio y arraigado estilo sonoro de Danny Elfman… consolidado, a su vez y desde finales de los años ochenta, como soundtrack de incontables imágenes televisivas y cinematográficas dentro de la cultura de masas… (aunque muchas personas aún no conozcan el rostro de su creador).
(Tema principal de la Banda Sonora Dumbo, 2019)